LAS NOTICIAS SON MAS OPTIMISTAS

A pesar de todo el revuelo que ha existido. De las posiciones intransigentes de uno y otro lado, al final se ha impuesto la cordura. El fantasma de la guerra ha desaparecido por el momento del escenario latinoamericano. La XX Cumbre de Presidentes del Grupo de Rio ha cumplido una labor mucho más relevante que la OEA.
Pero todo este problema, ha puesto de manifiesto que las tensiones no han salido de la noche a la mañana. Es razonable suponer que existe una serie de inconvenientes que a lo largo de los años, han ido deteriorando las buenas relaciones entre los países. También es evidente, que antes de esta crisis, no se había realizado el más mínimo esfuerzo por resolverlos. Y como no podía ser de otra manera, de pronto nos encontramos ante hechos consumados, que iban más allá de los usos, costumbres y prácticas de política internacional.
Como no soy diplomático me resulta difícil entender por ejemplo, cómo es posible que se pueda invadir un país, dar muerte a tus enemigos que se encontraban en ese otro país, y después ofrecer las disculpas correspondientes a los invadidos y seguir adelante como si no hubiese pasado nada. Y si los que se habían visto afectados reclaman por el mal proceder del invasor, entonces de inmediato se le acusa de recibir dinero de los irregulares. Que las pruebas están en la computadora del dirigente muerto que dió origen a todo este problema. Que el presidente de Venezuela le ha dado 300 millones de dólares a las FARC y ahora resulta que ya no sólo es una computadora la que se encontró en el lugar de los hechos, sino que las tropas encontraron cuatro computadoras. Entonces las revelaciones podrían continuar.